La penúltima prueba del circuito Gran Canaria World Trail Majors difícilmente podría haber tenido un mejor escenario. En la cara norte de los Pirineos, con Vielle-Aure como centro neurálgico, casi 8000 corredores estaban llamados a participar en el Gran Raid des Pyrenees —o GRP— en las diversas pruebas que componen el evento. El más largo y exigente, 160 km y casi 10 000 metros de desnivel positivo (más otro tanto negativo) es el puntuable para el circuito que se resolverá en noviembre en Ciudad del Cabo, Sudáfrica. Rémi Gillie y Anne Champagne se han llevado los 1500 puntos de la victoria en una de las ediciones de GRP con mayor nivel deportivo.
Primeras horas decisivas: Le Rohellec y Archambeau en cabeza
Con salida a primerísima hora de la mañana del viernes, los casi 700 inscritos de la Ultra 160 partían de Vielle-Aure poco antes de que el Sol despuntara por el horizonte. Por delante, una aventura de casi 20 horas para los primeros y algo más de dos días —49 horas para ser precisos— para los más lentos.
Al poco de salir los corredores se han tenido que enfrentar a un primer plato en forma de 1500 metros de desnivel continuo en poco más de 14 kilómetros. ¡Vaya forma de empezar! Cada uno haciendo su carrera tratando de no derrochar energías llegaron al tercer avituallamiento en la base de las pistas de esquí de La Mongie, siempre entre los 1600 y 2200 m de altitud. Menos de 31 km y 2500 m de desnivel veían cómo Loan Le Rohellec (Francia, Esclops d’Azun) en hombres y Juliette Archambeau (Francia) en mujeres pasaban primeros. Con una considerable distancia de ocho minutos, para la distancia de carrera, de Loan estaban Jan Gutermann (Francia) y Sangé Sherpa (Nepal, Kailas), poco después David Menanteau (Francia) era cuarto y Rémi Gillie (Francia), quinto. Y en mujeres tras Anne Champagne (Canadá, Salomon) y Junyue Zheng (China, Kailas) pasaban cerca de Archambeau.
Sin llegar a subir a las antenas del Pic du Midi du Bigorre, pasada la maratón se sitúa uno de los puntos más elevados de la prueba a casi 2400 m. Los pasos por los avituallamientos no alteraban significativamente las primeras posiciones. El tiempo era agradable en altitud, mayoritariamente despejado con previsión de que pudiera llover para el sábado y dado que durante cerca de 60 km se transita a más de 1500 metros de altitud los 28 ºC de Vielle-Aure se convertían en 10-15.
Hacia el avituallamiento de Hautacam (km 65), uno de los puertos clásicos del Tour de Francia, los desniveles se habían estabilizado, en ocasiones el terreno era más técnico, en ocasiones más corrible pero la bajada a la localidad de Villelongue (km 73) requería un descenso de 1200 metros lo que comenzaría a aclarar las posiciones. Loan Le Rohellec continuaba liderando con un hueco de diez minutes sobre Jan Gutermann y siete más sobre Rémi Gillie que de una forma pausada seguía remontando posiciones. Sangé Sherpa pasaba tras las plazas de podio pero aún poco relevante pues quedaba casi un centenar de kilómetros por delante.
Segunda mitad: Rémi impone su ley
Desde Villelongue una larga y tendida subida acerca a los corredores a la segunda mitad de carrera con +1500 m. Aulian, en el kilómetro 100, volvía a ofrecernos resultados parecidos: lidera Rémi Gillie con solidez, le sigue Jan Gutermann a trece minutos y tercero era Sangé Sherpa 27 minutos por detrás. Con opciones estaban Maxime Jaouen (Francia) y Diego Zanardo (Italia, Scuola di Maratona Vittorio Veneto).
La también conocida zona por el Tour de Francia de Luz-Ardiden implicaba otros 1000 metros de descenso para inmediatamente después ascender 700 en cuatro kilómetros: sin duda el recorrido es una importante trituradora de corredores. Sería el último avituallamiento para los primeros que harían sin encender los frontales.
A partir de entonces y siempre por encima de 1400 metros, los desniveles dejan de ser excesivos pero la fatiga acumulada hace mella en los participantes, del primero al último, aquéllos sumidos en la noche y éstos en la primera de las dos que tendrán que emplear.
En el kilómetro 146,2 se llega al punto más alto, 2465 metros, y lentamente se irá descendiendo a la deseada meta de Vielle-Aure a 791 metros sobre el nivel del mar.
Rémi Gillie llegaba eufórico a meta en un tiempo de 24:39:12 como justo ganador. Enorme esfuerzo el de Rémi que obtiene la recompensa de la victoria en una de las pruebas más queridas por los corredores de montaña franceses y que consigue también los 1500 puntos del circuito Gran Canaria World Trail Majors. En la línea de meta declaraba que «Estoy exhausto, me duele un poco todo pero es un pequeño sueño hecho realidad. En el último kilómetro iba pensando en mi familia y en todo lo que hemos hecho para llegar hasta aquí».
A 64 cruzó la línea de llegada Jan Gutermann en segunda posición, también exhausto, siendo tercero Maxime Jaouen. Sangé Sherpa ha sido finalmente cuarto sumando un buen número de puntos para la clasificación general seguido por los franceses Laurent Mendez, Guillaume Chaignon, Patxi Etcheverrigarray, Yves-Loup Fanton, Nicolas Firmin y David Leveille para completar el top 10.